Nuevas formas de socialización

La socialización es un proceso mediante el cual el individuo adopta los elementos socioculturales de su medio ambiente y los integra a su personalidad para adaptarse a la sociedad.

Dentro del proceso de socialización, se distinguen tres tipos. El primero corresponde a la familia, que es el ámbito más cercano al individuo y donde antes aprende a relacionarse con los demás. El segundo, abarca todo el grupo que es ajeno a la familia, es decir, grupos sociales de conocidos, amigos, u otros. Y el tercero, que ha nacido en la última década, recibe el nombre de “socialización a través de los medios de masas”.

Los medios de comunicación de masas proporcionan informaciones, juicios sobre diferentes temas y acontecimientos, y sobretodo, van formando en la población modelos de comportamiento. Además, sus contenidos repercuten en un volumen de población superior al de cualquier otro grupo de socialización.

Estos medios nos ofrecen ventajas en cuanto al modo de establecer relaciones, pero también algún que otro inconveniente. Una de las ventajas es la rapidez con que puedes encontrar un nuevo amigo, en menos de cinco minutos se establece contacto con diversos usuarios. En la vida real, esto no es tan fácil, nos cuesta (a unos más que a otros) formar nuevas amistades y mantenerlas. Uno de los inconvenientes es que poco a poco se va perdiendo el calor humano, en lugar de escuchar la voz de tu compañero solo escuchas el zumbido del ordenador y si quieres estrecharle en brazos…

En la red, los usuarios pueden mentir sin parar, y la única forma de descubrir su engaño es el “cara a cara”. Por esta razón, nos preguntamos si las relaciones que se establecen por medio de la red, son ficción o realidad. Cuantos casos han llegado hasta nuestros oídos, de gente que se enamora de otra sin haber mantenido nunca un contacto real entre ellos, y luego a la hora de verse cuerpo a cuerpo ha sido un total fracaso, porque uno había mentido… y el otro también. No decimos que todos los usuarios mientan, pero sí sabemos que tienen al alcance de su mano, algo que muchas personas desean, cambiarse por otro. Puedes crearte una nueva personalidad y un nuevo cuerpo, o simplemente mejorar las cosas que no te gustan de ti. Doble engaño, engañas al otro usuario y te engañas a ti mismo.

“El mayor peligro de engañar a los demás está en que uno acaba inevitablemente, por engañarse a sí mismo”. Eleanora Dose.



domingo, 22 de febrero de 2009

¿Word o papel?


Puede sonar raro, pero aunque sea de la generación de Internet y de las nuevas tecnologías, no sigo la moda de sentarse en frente del ordenador y esperar a que me "visite" la inspiración para poder llegar a escribir algo más o menos decente. Simplemente, porque mi cerebro a día de hoy ha sido incapaz de asociar inspiración con pantalla o teclado.

Y si, ya sé que escribir en Word o en cualquier formato de esas características te aporta una serie de ventajas que el escribir a mano no te permite. Pero personalmente, me decanto por el método de antaño basado en el folio en blanco, el bolígrafo y el dar rienda suelta a la imaginación. Me da igual que mi hoja acabe llena de tachones, o que sólo valgan dos malditas frases de la lluvia de ideas que haya podido escribir. Al fin y al cabo será el punto de partida, que finalizará desarrollándose o dándole forma en el Word.

Dicho esto, queda claro que formo parte de esa minoría que en sus mochilas, bolsos o carpetas tienen siempre un apartado repleto de hojas en blanco esperando aquello que muchos califican de inspiración.

3 comentarios:

Visi Doñate dijo...

Está claro que una presentación a ordenador siempre queda más profesional, ordenado y limpio que una presentación escrita mano. Pero la cuestión es otra, ¿por qué no complementar un formato con el otro? Se puede plasmar la inspiración en un folio y un boligrafo y luego ordenar las ideas y redactarlas a ordenador. Pienso que es una buena idea que quizás puede ayudar en un futuro a esta minoria de la que estás hablando. Cabe destacar que yo misma me incluyo en ella en algunos momentos en los que hecho de menos aquellos momentos en los que he plasmado mi imaginació e inspiración a través de un folio y un bolígrafo o un lápiz. Es un formato que no debe e olvidarse, puesto que a mi modo de ver resulta más personal, creativo y, a día de hoy, original.

Anónimo dijo...

Certament, no hi ha res que puga ser comparable a una escritura humana. Les paraules que veiem en qualsevol escrit informàtic ens transmiteixen la història escrita, però la forma personal de cada lletra,cada punt, etc. ens fan esvrinar la personalitat de l'escriptor i les seues vivències. Açò no ho podem veure en un escrit informàtic.

Vicent dijo...

Desde mi punto de vista, pienso que para redactar largos textos, es mas util, el Word, peró para una mayor comprensión y atención al texto, siempre llama más la atención un escrito hecho a mano, es más personal y directo, y aunque a veces resulte más ilegible, es mucho más cercano al lector, y causa mas impresión que las los textos escritos en las "perfectas" letras del teclado del ordenador.